Cómo hacer buenas páginas web (volver al índice)

Estándares web

Lo de los estándares puede ser complicado en otros campos, pero por suerte en Internet está todo muy claro:

¿Qué es un estándar?

Un estándar (o standard) es el modelo a seguir al hacer algo. Son documentos que dan los detalles técnicos y las reglas necesarias para que un producto o tecnología se use correctamente.

Un ejemplo típico es el de los códigos de barras, donde los etiquetadores y los fabricantes de aparatos lectores se entienden porque han seguido las mismas indicaciones sobre el cómo interpretarlos.

En la World Wide Web, algunos estándares actuales son: HTML, SVG, DOM, CSS, PNG, SOAP, XML, o HTTP. Lo siento, son todo siglas.

Es importante que entiendas que estándar no quiere decir algo que es muy usado y común. Por ejemplo, no puedo decir que el chino es el idioma estándar de la Tierra, ni tampoco el inglés. A este tipo de cosas se les llama estándares de facto o pseudoestándares.

Por si no te habías dado cuenta aún, estándar es lo contrario de tecnología propietaria, que es la que normalmente adopta una gran compañía y no pueden usarla los demás. Claro que también hay términos medios: tecnologías explicadas a medias, no explicadas pero conocidas, etc.

¿Quién los hace?

En el caso de Internet y, específicamente, el desarrollo web, la organización que hace los estándares es el World Wide Web Consortium (W3C), en el que todos pueden participar con sugerencias, críticas y mejoras. Otras organizaciones de estándares con las que colabora son ISO o IETF, que trabajan en temas más variados.

Verás que el W3C no les llama estándares sino recomendaciones, porque no se puede obligar a nadie a que los siga. Lo mismo pasa con otras organizaciones que hacen estándares, como ISO. O sea, que no es obligatorio seguir los estándares, pero si no lo haces te saldrán problemas.

¿Vale la pena seguirlos?

Naturalmente que sí; siempre es recomendable seguir las instrucciones del fabricante de un producto o tecnología.

Si lo haces todo tal como está explicado, saldrá bien. Y si sale mal, puedes echarle la culpa a otro: Ahhh... yo he seguido las instrucciones que dais; si están mal no es mi problema. Y es que en muchos sitios no te darán soporte técnico si no sigues el procedimiento oficial.

Fíjate en si vale la pena: los programadores de navegadores web se han leído el estándar HTML del W3C para saber en qué consiste el HTML. Si tú usas el mismo HTML (el que ha propuesto el W3C), todos te entenderán de la misma forma. Por eso una página con HTML correcto se ve bien en todos los navegadores.

Además, es más fácil y rápido escribir HTML correcto. Es mucho más sencillo de lo que puedas pensar (si aprendiste el HTML hace tiempo, mira el código de esta web y verás).

Qué pasa si no se siguen

Imagina que hablas o escribes a un extranjero que conoce lo básico del español. Si empiezas a hablarle en tu propia jerga (con abreviaturas, faltas de ortografía, sin acentos o con expresiones inventadas), le costará entenderte. Tiene dos opciones:

De éstas, la primera opción no es nada cómoda para él, ya que tiene que pensar mucho e incluso usar su imaginación. Eso no te favorece, porque a lo mejor acaba creyendo cosas que tú no has dicho, sólo porque las ha entendido mal. Hasta puede pasar que le digas la misma cosa a dos extranjeros distintos, y cada uno entienda algo diferente (y eso que cualquier amigo tuyo te entendería...).

En cambio, si te avisa de que él conoce un idioma (español) pero que no es el mismo que el que tú le estás hablando, podrás rectificar y tener una conversación normal, cómoda para los dos.

Aunque no lo parezca, el estado actual de Internet es el primero: los navegadores han de imaginarse qué es lo que quería decir el autor de cada página web, porque, en efecto, el lenguaje que se habla (HTML) no es el que entienden los navegadores. Por eso es normal que cada navegador interprete de forma distinta la misma web.

Por suerte, el estándar XHTML (el que debe sustituir a HTML con el tiempo) se comporta como en el segundo caso: si tú haces un documento XHTML mal escrito, el navegador ha de pararse y decir que no sabe mostrarlo (porque es que realmente no sabe). Así, todos los documentos XHTML serán legibles y claros. Todos hablarán bien el lenguaje, y sólo hará falta evitar las "frases" sin sentido.

Algunas falacias (mentiras que la gente se cree)

Hay gente que habla de todo sin saber. Algunas frases que he oído -impactantes para cualquiera que conozca CSS y HTML- son:

En el mundo real no hay tiempo para hacer las cosas bien

Por suerte, aquí hacerlo bien es más fácil. Si te aseguras de que en tu web sólo hay HTML y CSS correcto:

O sea, que tanto si eres un "profesional" que trabaja por dinero o un aficionado con poco tiempo libre, te interesa saber cómo conseguir buenos resultados con el mínimo esfuerzo. Cuesta un poquito aprender lo básico, pero es importante saberlo y te evitará problemas.

Por eso en el mundo real realmente se utiliza todo esto de los estándares, el HTML, XHTML, CSS, etc. No sólo es teoría.

Los estándares limitan a los diseñadores web

Alguien me ha llegado a decir: ¿Pero cómo voy a respetar los estándares, si sólo soy un diseñador, y además quiero usar Flash y JavaScript?.

Pues si te parece que ser correcto implica restringirse y no poder usar un montón de cosas, te equivocas. Si te propones aprender y usar los estándares (en contraposición a las tecnologías propietarias), tienes a tu disposición:

Así que no digas que los estándares te limitan, sino que gracias a los estándares abiertos tenemos Internet.

Los estándares de Internet Explorer son los más usados

Que no... que los estándares los hace el W3C. Si te refieres a las tecnologías propietarias de Microsoft que están muy extendidas (tanto que parece "normal" tenerlas, como Windows), a eso se le llama estándar de facto o pseudoestándar.

Y no, las tecnologías propietarias de Microsoft (como VBScript, ActiveX, JScript, o parte del llamado DHTML) no son muy comunes, pero cuando se usan en un sitio web molestan mucho. Lo que sí que es común es que cada uno escriba el HTML como quiera, mezclando cosas de todos lados.

Microsoft innova al salirse de los estándares

Los estándares que cito arriba no son nada anticuados (como pueda pasar con el diccionario de la RAE); al contrario: cada semana salen nuevos documentos, propuestas e informes técnicos, y se seguirá trabajando en ellos para simplificarlos y hacer todo más sencillo. Lo que se puede hacer ahora con CSS, PNG, o SVG es maravilloso.

En cambio, cuando Microsoft, en uno de sus productos -que siempre son anticuados- implementa mal un estándar por voluntad propia, crea el caos porque a partir de entonces habrá dos formas de hacer la misma cosa: la forma buena, y la mala. Muchos usarán la mala, y como algunos productos de Microsoft son muy usados, el mundo se llenará de cosas mal hechas. Eso es lo que pasa con las páginas web.

Resumiendo: los estándares no son anticuados. Niguna empresa tiene que renovarlos; quien piense que son malos que participe en su creación. Microsoft estropea todo al no implementarlos de la forma correcta.

Alguien decía una vez: voy a empezar a conducir en dirección contraria, ¿es malo? No, porque así obligo a los demás a ir más atentos y habrá menos accidentes, ¿no?